Opinión sobre el nuevo Sistema de Financiamiento Solidario para los estudiantes de educación superior

En términos generales, se trata de una política que avanza en la dirección correcta. Equilibra de manera responsable, aunque perfectible, los costos entre instituciones, el Estado y los estudiantes; sin perjuicio de que los mayores esfuerzos fiscales y beneficios se concentran en estos últimos. Esto es positivo, pero en los márgenes es también en perjuicio de algunas instituciones.

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