Análisis: cifras para tener en cuenta sobre los colegios subvencionados con fines de lucro
Cuando en el Congreso se discute el proyecto de Reforma Escolar que entre sus ejes tiene la prohibición del lucro en establecimientos subvencionados, resulta útil para el debate observar algunas cifras que permitan visualizar cuál es el impacto que hoy tienen estos colegios en el sistema escolar chileno, para entender los efectos que podría causar su eliminación.
AcciónEducar realizó un análisis al respecto cuyas principales conclusiones se muestran a continuación. Al final de esta nota se puede descargar el documento completo.
Lucro y cobertura
Chile es el país que presenta mayores tasas de cobertura en educación escolar cuando se le compara con sus pares latinoamericanos, lo que se aprecia incluso en aquellos alumnos más desfavorecidos, que pertenecen al primer quintil de ingresos. Lo anterior da cuenta de los importantes avances que Chile ha realizado en materia de cobertura en las últimas décadas, lo que está fuertemente ligado al dinámico crecimiento de la educación particular subvencionada, en especial de aquella que tiene fines de lucro: el año 2013, el 67% de la matrícula particular subvencionada asistía a establecimientos con posible lucro.
En Chile, de las 346 comunas, 246 tienen provisión de educación particular subvencionada con fines de lucro y en 154 más de un 20% de sus escuelas subvencionadas son con fines de lucro. Además se aprecia que en 56 comunas el 100% de su provisión particular subvencionada proviene de escuelas con lucro, es decir, si no fuera por ellas, estas comunas tendrían sólo oferta municipal en el sector subvencionado por el Estado.
Lo anterior indica, por un parte, que la oferta de educación particular subvencionada con posible lucro es parte importante de la oferta educacional del país, y que la presencia de este tipo de escuelas ha permitido diversificar la oferta de educación subvencionada.
Lucro y diversidad
La mayoría de los colegios subvencionados sin fines de lucro es confesional, 89% de su matrícula está en este tipo de colegios. En este ámbito los colegios subvencionados con fines lucro aportan diversidad al sistema: 67% de los alumnos que estudia en estos colegios está en un recinto laico.
Lucro, inclusión y copago
Se observa que los colegios subvencionados con fines de lucro atiende a la mayoría de los alumnos prioritarios que estudian en la educación particular subvencionada, llegando a un 65%, lo que indica la preponderancia de este sector para atender a la población desventajada socioeconómicamente.
En establecimientos particulares subvencionados con copago, 300 mil niños prioritarios estudian gratuitamente gracias a la Subvención Escolar Preferencial (SEP). Incluso en los establecimientos más caros, con cobros de mensualidad superiores a los $50.000, hay una proporción de al menos un 20% de alumnos prioritarios, lo que refleja a colegios con una matrícula diversa: alumnos vulnerables conviviendo en el mismo recinto con alumnos de más recursos.
En colegios subvencionados con fines de lucro que cobran copago, son 200 mil los alumnos prioritarios que estudian gratis por la SEP.
Lucro y aprendizajes
Al analizar los resultados por nivel socioeconómico en la prueba Simce 2012 en 4° básico, se observa que en general no existen diferencias estadísticamente significativas entre el sector particular subvencionado con fines de lucro y el sin fines de lucro.
En este análisis es interesante también tomar en cuenta el tamaño del sostenedor (si tiene o no varios colegios a su cargo) por cuanto aquellos más pequeños pueden no contar con el tamaño mínimo para alcanzar economías de escala que permitan utilizar de mejor manera los recursos con los que cuentan lo que también puede incidir en los resultados académicos. La mayoría de los particulares subvencionados sin fines de lucro opera en red, es decir administra más de un establecimiento (64% de la matrícula), no así el sector con posible lucro, donde la minoría de los sostenedores tiene más de un establecimiento (26%). Si comparamos el puntaje Simce controlando tanto por el nivel socioeconómico como el número de escuelas del sostenedor (sólo sostenedores con más de dos establecimientos), se obtienen resultados interesantes: el sector con fines de lucro logra resultados superiores y estadísticamente significativos al sector sin fines de lucro tanto en el nivel socioeconómico bajo como en el medio alto, superándolo por 12 y 9 puntos respectivamente.
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