Columna en El Líbero: Educación pública en marcha

• 5 de Julio, 2020

Con la Nueva Educación Pública, comenzó la implementación de los Servicios Locales (SLEP) que dejaron atrás a los municipios como responsables de la educación pública. Y durante estas últimas semanas, en la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados se ha revisado la implementación de éstos. Para lo anterior han sido invitados profesionales de los distintos Servicios, como los directores ejecutivos y la directora, para que, entre otras cosas, den a conocer la Estrategia de la Educación Pública que fue recientemente aprobada por el Consejo Nacional de Educación.

Es un hecho que la desmunicipalización no ha sido fácil, ya que la ley no previno la envergadura que tendría la creación de los nuevos SLEP y todo lo que esto conlleva.Los problemas asociados a la mala gestión y poca información con la que cuentan las municipalidades han afectado en el correcto traspaso. Además, la falta de competencias por parte de los departamentos municipales frente a una nueva administración que debe velar por un mayor número de colegios, docentes, asistentes, etc., perpetúan ciertos problemas que ya se observaban.

También se deben considerar las diferencias de las distintas comunidades educativas que conforman cada SLEP, desde sus necesidades, características, geografía, entre otros, y que entre esta diversidad se debe generar un sentido de pertenencia e identidad local, a partir de un organismo que es nuevo en la zona. Nadie puede quedar ajeno a lo complejo que resulta la tarea que se ha encomendado.

A pesar de todo, la implementación ha avanzado; con ciertos tropiezos y aprendiendo sobre la marcha, pero ha logrado ir instalándose de buena manera y ya son 7 SLEP funcionando, los que tienen el ambicioso desafío de ser los mejores sostenedores de Chile y con una tarea específica que les otorga la ley: entregar apoyo técnico y pedagógico a las escuelas que lo conforman. 

Dentro de este mismo proceso se elabora la Estrategia de Educación Pública que debe orientar la instalación y el trabajo de la educación pública, para ir avanzando en calidad. En ella, se pone especial relevancia a la toma de decisiones en base a evidencia, lo que implica generar un sistema de gestión de información que permita a las escuelas levantar sus necesidades e indicadores, de manera que tanto los Servicios Locales como la Dirección, puedan entregar los apoyos que se requieren, desde capacitaciones, herramientas y recursos, que permitan actuar previamente y así ir instalando las mejoras en las escuelas.

Durante esta pandemia, ha quedado demostrada la importancia de contar con buena información, que permita acudir con las herramientas necesarias y a tiempo donde más se requiere. Parte del problema al que nos enfrentamos es que no tenemos toda la información para conocer las situaciones de las escuelas y sus comunidades escolares que están pasando por mayores dificultades. Es por esto que avanzar en sistemas que permitan conocer y prevenir situaciones como el ausentismo, la deserción, el compromiso escolar, los problemas de convivencia y un sinfín de otras dificultades es fundamental para mejorar nuestro sistema educativo.

Por supuesto para que esto sea posible, la instalación de los SLEP debe hacerse de buena manera, siendo una de las reformas más grandes de la educación chilena. En ello su puesta en marcha no puede frenarse debido a la pandemia, ni acelerarse –para la correcta instalación se comienza a trabajar años antes de su traspaso efectivo-, como algunos han propuesto.

A partir del próximo año deberán instalarse 15 SLEP por año, algo que resulta casi imposible –si es que se quieren obtener los resultados correspondientes- en circunstancias normales y más aún dadas las dificultades que ha impuesto la pandemia. Es necesario evaluar estas acciones con prudencia y conforme a lo que sea mejor para un aprendizaje de calidad de los estudiantes y tenga sentido un cambio estructural como el que estamos llevando a cabo.

Por: Magdalena Vergara, directora ejecutiva Acción Educar.

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