La descentralización fue el tema de discusión en el último encuentro del ciclo de conversaciones “Bases para un acuerdo constitucional” que contó con la participación de Tania Villarroel, directora de Estudios de Acción Educar; Maximiliano Duarte, investigador de la Fundación P!ensa; Sascha Hannig, coordinadora de Programas Globales de la Fundación para el Progreso; Alejandro Fernández, director ejecutivo de la Fundación Pacto Social; Daniela Peñaloza, integrante del director de la Fundación Aire Nuevo; y moderado por Bettina Horst, directora de Políticas Públicas de Libertad y Desarrollo.
La directora de Estudios de Acción Educar centró su presentación en dos puntos: por qué es relevante la descentralización administrativa y cuáles son los factores que tienen que estar presentes para una descentralización exitosa.
Villarroel puntualizó que “existe una diversidad importante en los territorios de Chile, el contexto es fundamental y es diferente. Por lo mismo, son aquellas reglas hechas a la medida las que logran ser más beneficiosas y logran encontrar las mejores soluciones en la política pública”.
Al aterrizar el planteamiento en la Constitución, la abogada explicó que ésta “no solo debe reconocer que existe tal diversidad -cuestión fundamental-, sino que también debe promover que el foco de la decisión se traslade hacia aquellas personas o unidades locales que están más cercanas a la problemática y que puedan, por lo tanto, tener conocimiento de las particularidades”.
Sin embargo, a su juicio la autonomía y la descentralización por si solas “no hacen magia” y existen ciertos factores que son clave para que esta última sea realmente exitosa. En ese sentido, ejemplificó lo fundamental que son los grupos intermedios y la importancia de lograr resguardar su autonomía. Además, se debe tomar en consideración y aprender de las experiencias, identificar e incorporar aquellos factores clave para tener un proceso que culmine de forma óptima como son la generación de capacidades, la instalación de un sistema de rendición de cuentas adecuado y una buena relación entre las unidades locales y el gobierno central. Esto último requiere, además, un entendimiento del rol de los niveles intermedios como facilitadores del proceso de mejoramiento continuo de las unidades locales.
Por último, la abogada advirtió que todas estas modificaciones constitucionales podrían no tener un efecto inmediato en el día a día: “La Constitución necesita, generalmente, leyes para poder implementarse, el mejor ejemplo de ello es el caso de Kínder Obligatorio, que, si bien está establecido en la Constitución, la ley aún no ha sido aprobada en el Congreso”.
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