Efecto de la violencia escolar en el rendimiento académico

Durante los últimos meses, los establecimientos educacionales chilenos han experimentado, dentro de sus dependencias, un aumento importante en la frecuencia y gravedad de actos violentos. Esto ha sido reportado ampliamente por la prensa nacional y, al mismo tiempo, se ha traducido en una fuerte alza de las denuncias ingresadas por violencia escolar a la Superintendencia de Educación (datos a junio de 2022).

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En ese contexto, en el presente documento se estudia el impacto de la violencia escolar sobre el rendimiento académico de los alumnos. La relación mencionada se estudia en sus efectos de corto plazo y el rendimiento académico se cuantifica con pruebas estandarizadas a nivel nacional. 

Resumen Ejecutivo

-La crisis de violencia escolar observada en nuestro país motiva una medición de las pérdidas en aprendizajes que son efecto de actos violentos y/o agresivos dentro de los establecimientos.

-El aumento de la violencia dentro de la escuela es otra dimensión de una crisis educativa de extrema gravedad. Sus causas pueden diferir y, por tanto, también sus soluciones.

-El presente estudio mide el efecto de que un niño o niña reciba violencia sobre su rendimiento en las pruebas SIMCE 2017-2018 de Comprensión Lectora y Matemáticas.

-Los resultados muestran que ser víctima de algún tipo de violencia impacta negativamente en el rendimiento académico obtenido, por muy baja que sea la frecuencia de la victimización.

Un niño o niña que fue víctima de violencia verbal y/o física frecuentemente durante el último mes rinde, en promedio, 14 puntos menos en Comprensión Lectora (0,3 desviaciones estándar) y 7 puntos menos en Matemáticas (0,14 d. e.) que el promedio de sus pares que no la han sufrido.

-Los resultados encontrados permiten proyectar que existirán pérdidas de gran magnitud en aprendizajes, atribuibles a la actual crisis de violencia escolar.

-Luego, el diseño de política pública para contribuir a la recuperación de la convivencia escolar debería incluir capacitación adicional a los equipos directivos y docentes, involucramiento de los padres y apoderados en el proceso educativo y ofrecer apoyo financiero y político a las comunidades más afectadas por la violencia escolar.

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Escrito por Manuel Villaseca

Director de Estudios (s)