Tres comisionados, dos representantes estudiantiles y el jefe de Educación Superior del Mineduc integran la instancia, donde se decide con al menos cinco personas.
En la mesa de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) cada vez hay más puestos vacíos. Los miembros siguen cumpliendo sus plazos y, a la fecha, son tres los comisionados que quedan: José Luis Martínez (vicepresidente), Víctor Cubillos y Hernán Burdiles.
Completan el equipo el jefe de Educación Superior del Mineduc y dos representantes estudiantiles. También la secretaria ejecutiva, quien no vota. Así, quedan seis personas para zanjar las cruciales decisiones de acreditación en torno a programas e instituciones, a la espera de que el Senado revise la nómina de candidatos para conformar la nueva CNA, que el Ejecutivo hizo llegar en marzo.
Al límite
En este ajustado escenario, los integrantes que quedan siguen sesionando y trabajan con una importante carga de tareas, debido a los cambios que la reforma hizo a la acreditación. Avanzan con prioridad en la revisión de carreras de pregrado y posgrado, pero algunas decisiones quedan pendientes.
Según el reglamento, “para adoptar sus acuerdos, la comisión requerirá de la mayoría absoluta de los integrantes presentes y habilitados para votar y, en todo caso, con un mínimo no inferior a cinco miembros”.
De los seis que quedan, además, dos -Martínez y Burdiles- tienen que dar un paso al costado al ver temas ligados a la U. de Chile. “Deben inhabilitarse en procesos que involucren a instituciones de educación superior con las que tienen algún tipo de participación. Lo que está ocurriendo es que procesos que debiesen estar normalmente en revisión no se están viendo”, advierte el subsecretario de Educación, Raúl Figueroa.
“Urge que se dé curso a la nueva integración de la comisión, por un lado para poder implementar adecuadamente los cambios que están establecidos en la ley y también para poder asegurar el normal funcionamiento de la comisión, que hoy, por las razones que hemos explicado, está en riesgo”, añade.
Además de certificar programas e instituciones, la CNA debe avanzar en la definición de los nuevos criterios de acreditación. Debían regir desde 2020, pero el Congreso aún tramita la opción de aplazar esto y que, el próximo año, los planteles puedan acreditarse bajo los parámetros ya conocidos.
“Es cuestionable la legitimidad que pueda tener la discusión de estos criterios si no está la comisión definitiva. También si son solo seis miembros y dos de ellos son estudiantes”, señala Magdalena Vergara, directora ejecutiva de Acción Educar.
“A ellos (los nuevos integrantes) les va a tocar implementarlo; no a las personas que hoy día se van”, agrega Vergara, quien enfatiza que la carga que la reforma trajo a la CNA -al transformarla en la única entidad acreditadora y sumar nuevos procesos, como la certificación obligatoria de doctorados- es muy alta para seis personas.
Decisión política
El Ejecutivo debe proponer seis nombres al Congreso para conformar la nueva comisión (ver recuadro) y en enero se envió una primera nómina, que luego se modificó en marzo. “Estamos a la espera de que el Senado conozca la propuesta y se pronuncie”, señala el subsecretario.
Este martes 23, la Comisión de Educación de la Cámara Alta contempla recibir a los tres académicos universitarios que conforman la lista enviada por el Presidente: Erika Castillo, Bernabé Rivas y Sergio Bravo, quienes realizarán exposiciones ante los parlamentarios.