Dejaron la ciudad de la “eterna primavera” por el río Calle Calle, los bosques y las lluvias. El año pasado, 22 jóvenes salieron de colegios en Arica para matricularse en una institución de educación superior de Los Ríos. El principal destino: la Universidad Austral.
En este plantel cuentan que el prestigio de las carreras agropecuarias y la posibilidad de vivir en el sur lleva a que lleguen alumnos de todo el país.
Y es que aunque cada año crece la oferta de planteles en todo el territorio nacional, la migración de alumnos no cede, y en 2014 más de 150 mil dejaron sus hogares. Así lo revela un informe del Servicio de Información de Educación Superior del Mineduc, que agrega que el 44% se muda a Santiago, pero también que buena parte sale hacia una universidad con 6 o 7 años de acreditación.
Una situación que han advertido en los planteles de regiones que destacan por tener muchos matriculados de otras zonas. Néstor Tadich, vicerrector académico de la Universidad Austral, afirma que esta diversidad permite que los propios jóvenes creen redes de apoyo y conozcan mejor la realidad del país. Para ayudarlos en el “aterrizaje”, un equipo los ayuda a ubicarse en pensiones y también les presta apoyo emocional.
Algo similar a la Universidad Católica de Valparaíso, donde el 40% de los alumnos proviene de otra región. Junto al apoyo psicológico para afrontar estar lejos de casa, el vicerrector académico, Nelson Vásquez, dice que trabajan con los profesores que hacen clases en primer año, para que puedan fomentar la creación de grupos de estudio. También tienen diplomados para docentes que preparan a enseñar en aulas diversas.
Nuevas universidades
Según el reporte, el 73% de los jóvenes en Aysén y el 57% en O’Higgins dejan la zona para estudiar. Algo que para el jefe de Educación Superior del Mineduc, Francisco Martínez, confirma la necesidad de crear universidades en ambas regiones.
“Para lograr más equidad en el acceso y pertinencia en la investigación con las necesidades de la región, necesitamos universidades estatales en O’Higgins y Aysén, y garantizar una oferta pública universitaria de calidad en cada región”, dice.
Un factor que también justificaría la creación de 15 centros de formación técnica, proyecto de ley que se debate en el Congreso, junto al que abre las nuevas universidades.
Sin embargo, Raúl Figueroa, de Acción Educar, dice que las cifras ponen en duda la eficacia de las iniciativas. Sobre las universidades, sostiene que el desafío será equiparar en calidad a las que hoy eligen los alumnos que migran. Respecto de los centros de formación técnica, cree que no alterarán la situación actual, porque “no hay excesiva presión por contar con esa nueva oferta”. Esto, porque el informe del Mineduc muestra que del grupo que sale de su región para estudiar, 71% busca una universidad, 21% un instituto profesional y solo 8% un centro de formación técnica.
“Dedicamos muchos recursos propios a los estudiantes, con programas de inclusión. El 70% de los alumnos viene de familias con menos recursos”. NÉSTOR TADICH, Vicerrector académico U. Austral
“Se sienten muy solos cuando llegan, y el apoyo psicosocial pasa a ser muy importante. Otra estrategia es trabajar con los profesores”. NELSON VÁSQUEZ, Vicerrector académico UC de Valparaíso