A julio se había utilizado el 27% de los montos disponibles, lo que se manifiesta en ítems como mejoras a la infraestructura de liceos tradicionales o apoyo al deporte.
El Gobierno ha enfatizado en la urgente necesidad de fortalecer la educación pública, tanto escolar, cuyos colegios municipales viven su peor crisis de fuga de matrícula, como superior, en la que existe una reforma en curso y la creación de nuevos planteles.
Sin embargo, los programas del Ministerio de Educación relativos al fortalecimiento de la enseñanza pública son los que registran la menor ejecución presupuestaria al interior de la cartera -sin contar la recién creada Subsecretaría de Educación Parvularia-, según la última información disponible en la Dirección de Presupuestos (Dipres), a julio recién pasado.
Los programas de educación pública (escolar y superior) tienen apenas 27% de gasto devengado de sus recursos asignados: $127 mil millones de un total de $449 mil millones disponibles durante este año.
Entre las áreas con menor gasto aparece la de apoyo a la recreación y el deporte: de $2.245 millones de presupuesto, solo se habían usado poco más de $1,8 millones hacia julio, es decir, menos del 1%.
También tienen una baja ejecución la partida de infraestructura para liceos públicos tradicionales (23,4% de su presupuesto gastado), perfeccionamiento para profesionales de la educación (1,5%) y asesoría a laeducación escolar (9,9%).
A nivel de enseñanza superior, los fondos para innovación, para la educación regional y el fortalecimiento a las universidades aparecen sin ejecución, mientras que el fondo de infraestructura y el Convenio Marco de Universidades Estatales tienen gastado solo 18% y 33% del dinero disponible para 2016, respectivamente.
Esto contrasta con la situación de otras áreas de la cartera donde, por ejemplo, en el caso de los recursos para financiar la gratuidad a la misma fecha se había gastado el 43% del presupuesto disponible; en las becas para educación superior, el 38%; y en los programas de alimentación de la Junaeb, más del 42%.
Ejecución a fin de año
Ante tal panorama, en el Ministerio de Educación afirman que no hay retrasos. Respecto al fondo de apoyo a la educaciónpública, dicen que el decreto que distribuye los recursos fue aprobado a fines de marzo y que “los primeros convenios se tramitaron en mayo; y recién terminado este proceso es posible realizar la transferencia de la primera cuota”, pero aseguran que la mitad del dinero ya fue entregada.
Sobre los liceos tradicionales, las platas para infraestructura se transfieren “de acuerdo al estado de avance de las obras, recursos que están respaldados a través de convenios firmados con los sostenedores municipales”, según el Mineduc.
Mientras que en los programas de asesoría escolar y apoyo al deporte, la cartera asegura que el mayor gasto se da a fines de cada año, “debido a todos los temas administrativos involucrados”, como la selección de los colegios. Pero advierten que en este momento “se encuentra en proceso la confección de las órdenes de compras”.
Lo mismo ocurre -según el Mineduc- en educación superior: el apoyo a innovación, educación regional y fortalecimiento a universidades “está supeditado a la entrega de informes de avance en julio de cada año”, para luego emitir el decreto de distribución entre agosto y septiembre. “Por lo anterior, eso no implica un atraso en la ejecución presupuestaria”.
El ministerio destaca que, a junio, su ejecución era 1,9% mayor que el año pasado.
Expertos cuestionan la capacidad de gestión al interior de la cartera
Respecto a la ejecución presupuestaria en los programas de educación pública, el director Ejecutivo de Acción Educar, Raúl Figueroa, dice que “esta es baja fundamentalmente porque existe un cierto desorden interno en el Ministerio de Educación, que evidentemente se traduce en desprolijidad en la implementación de ciertas políticas”.
A su juicio, “resulta paradójico que la ejecución sea tan baja considerando los énfasis que este Gobierno les ha dado en el discurso a esos aspectos. Y es algo que también se observa en la implementación de las nuevas universidades o los centros de formación técnica estatales”.
Para María Paz Arzola, investigadora del programa social de Libertad y Desarrollo, “es síntoma de que hay un problema de capacidad del sector público para realizar los procedimientos necesarios para aprobar los proyectos a tiempo. Uno debiera cuestionarse la capacidad de llegar de manera oportuna con los recursos que se necesitan”.
Ambos coinciden en que al llegar al segundo semestre con una ejecución de recursos baja y teniendo que enfrentar la discusión del proyecto de ley de presupuesto para el próximo año, “muchas veces hay un efecto negativo en que existe una presión por gastar rápido, y no necesariamente gastar de manera adecuada”, en palabras de Arzola.
$9,6 billones es el presupuesto total del Mineduc, incluyendo todas sus reparticiones y programas. De ese dinero, a julio se había gastado el 49,8%.
$2.245 millones es el monto asignado al plan de apoyo al deporte y la recreación, del cual se han empleado solo $1,8 millones.
1,5% es el gasto del plan de perfeccionamiento para profesionales de la educación: de sus $2.645 millones, se han usado $39 millones.