Aunque el sistema de acreditación está en proceso de cambios, una institución de educación superior que realiza investigación de calidad y aplicada es reconocida, por la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), como una entidad de excelencia.
(Extracto del artículo de El Mercurio, para verlo completo ingresa aquí)
La generación y aplicación de conocimientos es un tema clave para el desarrollo de Chile. Y ello se logra, principalmente, a través de la investigación que se realiza en las instituciones de educación superior del país.
Para que este proceso de investigación sea exitoso -es decir, que proponga soluciones a los problemas y/o necesidades que tiene la sociedad- no solo debe ser realizado por profesionales con grados académicos avanzados, sino que también en instituciones con un proyecto educativo acorde.
Precisamente esto es lo que resguarda la Acreditación en Investigación, que es una de las dimensiones en las cuales puede ser evaluada una institución de educación superior, tema no menor si se considera que la certificación que entrega la Comisión Nacional de Acreditación es una garantía pública de calidad, que permite que los estudiantes puedan optar por un centro de estudios que efectivamente otorgue la formación que ofrece (…).
En opinión de Tania Villarroel, directora de Estudios de Acción Educar, es fundamental que el área de Investigación siga creciendo, porque ‘aporta al desarrollo del entorno, creando soluciones para el país y generando innovación’.
Ello ha quedado en evidencia durante la pandemia, donde la comunidad científica nacional e internacional ha realizado en trabajo mancomunado buscando soluciones para los efectos que está dejando el covid-19 en distintos ámbitos.
‘La investigación contribuye al desarrollo del país, al posicionamiento del mismo a nivel internacional y a avanzar en las distintas áreas del conocimiento. Esto se vio reflejado claramente con la pandemia, en que las universidades pusieron sus laboratorios a trabajar para hacer frente al coronavirus. Ejemplos hay muchos, incluidos los estudios sobre el impacto en el ámbito socioemocional de la pandemia en los niños y niñas, que han sido fundamentales para entender mejor cómo están nuestros niños y cómo hacernos cargo’, añade.
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