Pese a sus grandes diferencias, Vitacura y El Bosque tienen algo en común y es que casi todos sus colegios particulares subvencionados tienen fines de lucro. Lo cierto es que esta práctica, que la reforma educacional pretende erradicar de los colegios del país, está presente en gran parte del territorio y en muchas comunas es la opción mayoritaria.
Según un estudio de Acción Educar, el 40% de todos los colegios de la Región Metropolitana son particulares subvencionados que están constituidos como sociedades comerciales, es decir, que pueden lucrar. En total, son 851 establecimientos, donde estudian más de 500 mil alumnos. Si sólo se considera el sector particular subvencionado, las escuelas que pueden extraer utilidades suben al 73%.
A nivel territorial, los colegios subvencionados con fines de lucro se encuentran presentes en 47 de las 52 comunas de la RM; y en 43 de éstas más de la mitad de toda la oferta particular subvencionada corresponde a escuelas de ese tipo.
En una de esas comunas –Vitacura– la totalidad de los colegios particulares subvencionados puede lucrar. Y en otras cuatro –El Bosque, Padre Hurtado, Lo Prado y La Florida– éstos representan más del 90%.
Por contrapartida, en Lo Barnechea y Pirque todos los colegios subvencionados son sin fines de lucro. Y en tres comunas rurales –Alhué, María Pinto y San Pedro– no existe ningún colegio particular subvencionado, sino que toda la oferta del sector subvencionado son escuelas municipales.
El director ejecutivo de Acción Educar, Raúl Figueroa, afirma que los datos demuestran que “el efecto de la reforma educacional será muy fuerte en algunas comunas”, donde el sector subvencionado con fines de lucro está muy arraigado. “Hay algunas comunas, como La Florida, San Miguel, El Bosque, Maipú y Puente Alto, donde el impacto de una medida como ésta podría ser muy importante”, advierte.
En su análisis, de aprobarse la reforma tal como está, “a muchos sostenedores les será difícil adecuarse a las nuevas exigencias y, por lo tanto, no conocemos el número, pero es posible que muchos sostenedores opten por cerrar sus establecimientos o bien pasarse al sistema particular pagado”, lo que “podría poner en riesgo la diversidad del sistema”.
Más lucro en la zona sur y poniente de la capital
Si bien los colegios particulares subvencionados que pueden lucrar están presentes en prácticamente todas las comunas de la Región Metropolitana, se concentran en mayor medida en la zona sur y poniente del Gran Santiago, con presencia importante en comunas como La Florida, Puente Alto, Maipú, San Bernardo, El Bosque, Lo Prado y Padre Hurtado.
Mientras que en el sector oriente –excepto Vitacura– y en el centro de la capital su presencia es menor. Así, en Santiago, Providencia y La Reina los colegios con posible lucro sólo representan cerca del 30%; y en Estación Central y Las Condes bordean el 50%; sumándose a Lo Barnechea (0%).
Figueroa dice que esto se puede explicar debido a que en el sector oriente hay una gran cantidad de colegios particulares pagados, y en las comunas céntricas –como Santiago y Providencia– una alta presencia de liceos municipales emblemáticos, que captan a un número importante de alumnos, dando menos cabida a los particulares subvencionados. De hecho, Santiago Centro es la segunda comuna con más colegios municipales de la región, con 38 recintos. A eso se suma que son áreas urbanas más saturadas, con menos espacio para construir nuevos colegios.
En cambio, en las comunas periféricas hay menos presencia de colegios pagados y municipales de alta calidad, y son zonas en expansión, con espacio para levantar nuevos colegios, que tienden a ser particulares subvencionados.
Al analizar las características particulares de los colegios subvencionados con fines de lucro, se constata que un alto porcentaje cobra mensualidad a las familias y sólo una pequeña parte (19%) son gratuitos. En tanto, la gran mayoría de éstos (73%) son laicos, a diferencia de los sin fines de lucro, donde predominan los proyectos confesionales (81%).
Por esa razón, Figueroa dice que si esos colegios no pudieran continuar “te quedarías con un sistema mucho menos diverso, donde la oferta educativa quedaría exclusivamente concentrada en lo municipal y en los colegios de Iglesia”.