A contar de marzo se elimina el aforo y la presencialidad, que será obligatoria, solo se suspenderá en un curso cuando tres estudiantes den positivo para Covid-19. Para que un colegio cierre tendrán que darse al menos nueve contagios en tres niveles distintos. Los recintos, además, deberán habilitar una sala para poner en cuarentena a alumnos o trabajadores que manifiesten síntomas.
Por R. Gálvez
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En un artículo publicado en La Tercera, se da cuenta del “Protocolo de medidas sanitarias y vigilancia epidemiológica para establecimientos educacionales” presentado por el Mineduc, en el cual se reitera que las clases presenciales serán obligatorias y se detallan los planes de acción frente a casos de Covid-19.
A pesar de lo anterior, algunos actores del sector educativo se han manifestado en contra de la vuelta a las aulas. En ese sentido, Borja Besa, investigador legislativo de Acción Educar, señaló al medio que el protocolo va en la línea correcta, toda vez que “es imperante terminar con los gallitos políticos y poner el interés de los niños en primer lugar, los cuales ya han pagado un altísimo costo estos dos años de pandemia”. Por eso, añade, “es fundamental que vuelvan a sus lugares seguros de aprendizaje, con sus compañeros y profesores, para así garantizar su tan preciado derecho a la educación”.
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