El profesor solo tiene que pasar su celular por la prueba y listo. El sistema educativo chileno, sin embargo, privilegia las pruebas de desarrollo.
Una de las quejas de los profesores es que no tienen tiempo para corregir las pruebas. Un grupo de ingenieros de la UC hizo un estudio al respecto y logró crear una aplicación para celulares capaz de reducir el tiempo. Pero no solo eso. Actualmente se utiliza en tres establecimientos de la Región Metropolitana y seis de Valparaíso. Lucas Espinoza, ingeniero civil de la PUC, especializado en tecnología de la información, lideró el desarrollo. ‘Un profesor al año tiene que corregir 2.400 pruebas aproximadamente y por cada prueba se tarda cuatro minutos.
Pero Quipu (así se llama la aplicación) permite escanear y revisar pruebas con alternativas en segundos. Esto a través de las fotos registradas por las cámaras de los equipos (la base de datos se actualiza con cada examen)’. Por si fuese poco, Quipu también se integra con el sistema de notas del colegio y sube las calificaciones.
Mónica Venegas, profesora de Lenguaje de Enseñanza Media, es una de las docentes que utilizan la aplicación en el Instituto Comercial Particular La Cisterna. ‘La encuentro maravillosa. Como profesora ocupaba muchas horas revisando pruebas. Me demoraba 2 horas por curso y ahora me demoro 10 minutos’, dice. Venegas afirma que la aplicación también le ha servido para ser más autocrítica. ‘Ahora tengo automáticamente la estadística de la pregunta que tuvo menos respuestas correctas. Lo que me permite eliminarla, porque me he dado cuenta de que como profesora he redactado preguntas mal o no he pasado bien el contenido’. Y agrega que ahora la retroalimentación pedagógica es inmediata. ‘Después de corregir, puedo proyectar la prueba en la pizarra y dar las respuestas correctas. Todo en la misma clase’.
Hay que aclarar, sin embargo, que esta aplicación se topa con el sistema educativo chileno, que promueve el uso de pruebas de desarrollo. Magdalena Vergara, directora ejecutiva de Acción Educar, comenta: ‘En un proceso formativo se busca que tanto el estudiante aprenda de sus errores, como el profesor en cuanto a sus métodos de aprendizaje y los medios para ello. Las pruebas de desarrollo permiten evaluar la comprensión, la síntesis, la organización de ideas y conceptos y la capacidad comunicativa del alumno. Las de selección múltiple también lo hacen en gran medida, pero no permiten medir dimensiones y habilidades más complejas. Además, si bien son más fáciles para corregir que las de desarrollo, su elaboración requiere más dedicación para que la evaluación sea efectiva’, dice.
El Quipu, aclara Espinoza, era una herramienta de cuerdas con nudos que usaban los incas para llevar la contabilidad. Le pusieron así porque esperan que la app se pueda utilizar en toda Latinoamérica.