Durante este último año, como es nuestra misión, hemos sido testigos y partícipes de los debates políticos que han ocurrido no solamente en relación al sistema educativo, sino que también al país, los que marcarán la hoja de ruta de los próximos años y el futuro de Chile.
La pandemia, la violencia y la polarización política han dificultado un debate sereno y razonado, que tenga a los estudiantes y las familias en el centro de su preocupación. Este escenario nos invita con mayor urgencia volver a la raíz y los principios que inspiran a Acción Educar. Es en este contexto en el cual es fundamental trabajar por una sociedad libre, en la que el desencuentro vaya perdiendo relevancia y podamos seguir construyendo y empujando con mayor fuerza el anhelo de un país en el que se valora la diversidad, la libertad, y el respeto por preservar los avances y logros conseguidos.
En ese sentido, como fundación que es parte de la discusión pública y que tiene como misión aportar al debate nacional, decidimos colaborar a través del debate programático presidencial, por medio de diálogos abiertos, y en el debate constitucional, presentando una iniciativa popular de norma que defendiera el desarrollo de un sistema educativo con provisión mixta, protegiendo la libertad de enseñanza y el derecho preferente de los padres a elegir de acuerdo a sus convicciones, devolviendo a las familias su rol protagónico en la educación de sus hijos.
Todos estos conceptos y principios los fuimos defendiendo y plasmando en cada uno de los eventos, hitos e instancias en las que participamos, mostrándonos al país como una institución comprometida con los niños de Chile y el desarrollo de una sociedad en la cual exista un sistema educativo de excelencia, dinámico e innovador. Hoy el desafío está en poner a la educación en el centro como el lugar del cual emerge el futuro de nuestro país.
Los invitamos a leer nuestra memoria correspondiente al período julio 2021-junio 2022.
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