Así lo revela un estudio de Acción Educar. El análisis concluye que aquellos estudiantes que provenían de familias de los tres quintiles más vulnerables de la población, tras obtener el CAE y comenzar a trabajar, lograron en su mayoría subir al quintil más rico.
Sólo un 11% de los deudores del Crédito con Aval del Estado (CAE) podría acceder a la propuesta que hizo el candidato presidencial Alejandro Guillier sobre condonar a aquellos que están en el 40% más vulnerable de la población.
Así lo refleja una estimación hecha por Acción Educar, fundación sin fines de lucro especializada en educación, que en un estudio señala que de los actuales deudores al día, sólo 20.188 personas (11%) estarían en el 40% más pobre de la población.
El análisis contempla el ingreso que reciben los deudores una vez que terminan sus estudios y comienzan su etapa laboral, y detalla que cuando éstos comienzan a trabajar, logran aumentar considerablemente sus ingresos, por lo que aquellos que se encontraban en los quintiles más bajos, consiguen moverse hacia los más altos. Ese es justo la etapa, cuando aumentan su salarios, en que se evaluaría la condonación de la deuda de las personas de menores recursos, según propone el candidato de Fuerza de Mayoría.
Eso sí, para hacer el cálculo, el documento titulado “Aproximación a la movilidad social entre quienes estudiaron con CAE”, considera un universo acotado, que es el único donde se puede tener toda la información para hacer este cálculo: evalúa sólo a aquellos deudores que han solicitado una rebaja de su cuota mensual de pago al 10% de su sueldo.
Esto, considerando que desde que comenzó a funcionar el CAE en 2006, hasta el cierre del año pasado, eran 808.366 personas las beneficiarias de este sistema. De ese total que consigna la Comisión Ingresa, 304.235 eran los créditos en etapa de pago, ya que los restantes no pagan por encontrarse estudiando o en su período de gracia. De este universo, 189.687 deudores no registraba morosidad, requisito necesario para acogerse al beneficio de rebajar la cuota del crédito al 10% de la renta. Así, un 17% (32.715 personas) postuló a este último proceso.
Es precisamente este último segmento el que fue analizado en el estudio, ya que son los únicos que tienen que reportar cuánto es el sueldo que perciben. “Un 83% (156.972 personas) no postuló a la rebaja de cuotas y por ende es presumible que se encuentren en una situación más favorable que la presentada en este análisis, de modo que pueden prescindir del beneficio y/o poseen rentas que son altas en comparación a las cuotas que deben pagar”, detalla el documento.
El análisis concluye que aquellos estudiantes que provenían de familias de los tres quintiles más vulnerables de la población, ahora en su mayoría se encuentran en el quintil más rico. El informe va más allá y dice que cerca del 60% de los deudores que postularon a la rebaja de cuotas, pertenecería al 20% más rico de Chile. Esto se daría incluso a pesar de tratarse de aquellos que presumiblemente tienen mayores dificultades para pagar su crédito.
Con todo, la deuda promedio de un egresado con CAE es de $6.270.0002 y la de un estudiante que desertó de su carrera financiada con CAE es $3.670.000, según datos de la Comisión Ingresa.
Las otras cifras del CAE
Los candidatos presidenciales han señalado que son unos US$8.000 millones los que adeudan los beneficiarios del CAE. Este monto es financiado en parte por los créditos que otorga la banca, pero la otra mitad la aporta el Fisco, y una parte más pequeña la financian las instituciones de educación superior.
En 2016 el Fisco aumentó de 42% a 58% su participación en el financiamiento de los nuevos créditos asignados, versus el año anterior. Esto se explica “por la incertidumbre que los bancos tenían al momento de decidir participar del proceso de licitación”, señala la Comisión Ingresa en su última cuenta pública. A raíz de esto, la tasa que lograron conseguir los créditos fue más alta de lo esperado, por lo que el Fisco tuvo que hacerse cargo de la diferencia.
Pese a que son los quintiles de menores ingresos los que han recibido mayor monto de créditos ($298.606 millones en el caso del primer quintil, como muestra el gráfico), ocurrió lo inverso durante el año pasado gracias a la puesta en marcha de la gratuidad en la educación.