El Mercurio: La revancha de las iniciativas que no quedaron en la propuesta constitucional

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Estaba empezando febrero cuando se cerró el proceso para ingresar Iniciativas Populares de Norma (IPN) a la Convención Constitucional. Un total d 78 propuestas habían logrado recolectar las 15 mil firmas necesarias para que fueran discutidas por el organismo y había ilusión entre las organizaciones civiles.

Sin embargo, a casi seis meses de ese hecho, parte de los protagonistas de esas propuestas miran con decepción el proceso. La mayoría de las ideas que impulsaron quedó fuera del texto final, incluyendo la que más firmas obtuvo, “Con mi plata no”, que buscaba asegurar la propiedad de los fondos de pensiones.

Hoy los representantes consultados denuncian haber sido excluidos del proceso por las ideas que representan, y sienten que predominaron ciertas posiciones políticas a la hora de votar sus normas.

Bien recibidas, pero rechazadas

“Tuvimos un tremendo apoyo ciudadano, por eso nos sentimos tan decepcionados cuando se rechazó nuestra propuesta”, asegura Marta Salazar, integrante y vocera del movimiento ciudadano “Con mi plata no”. Destaca que las ideas que promovían fueron desestimadas “una y otra vez” y que “con esto, en verdad, la mayoría de los chilenos no fuimos escuchados y la Convención no nos protegió”.

Iniciativas rechazadas en educación

Un fenómeno similar le ocurrió a la iniciativa de Acción Educar, con 28.942 firmas. Su director ejecutivo, Daniel Rodríguez, asegura que si bien se consideraron “declarativamente” algunas ideas de las que impulsaron, “no se tuvo en cuidado o consideración de miradas distintas de las que predominaban en la mayoría cómoda que tenían” determinados sectores.

Luis Baeza, quien trabajó por “Educación libre y diversa” (20.517 firmas) cuenta que se reunieron transversalmente con diferentes sectores. “Todos nos decían que había que defenderla, pero al momento de votar, se votó en bloque y se pensó más en ese acuerdo político que tenía un sector de convencionales, más que en la representatividad de las IPN”, dice.

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