El Sur: Beca Vocación de Profesor mantiene cifras en la región del Biobío

Distintos sectores de la educación advierten que poca claridad en medidas como la carrera docente, gratuidad y desmunicipalización podría atentar con la medida implementada en 2011. 

Por F. Cuevas

En 2011, el ministerio de Educación del Gobierno de Sebastián Piñera comenzó a implementar la Beca Vocación de Profesor (BVP) que busca “mejorar la calidad de los profesores, tanto en el ámbito pedagógico como disciplinario; incentivando el ingreso, permanencia y egreso de estudiantes destacados a carreras de Pedagogía”.

Cinco años después, cuando un grupo importante de beneficiarios se dispone a terminar su carrera universitaria y entrar al mundo laboral, el escenario actual refleja que menos estudiantes han tomado el beneficio de tener la cobertura total de la matrícula, arancel anual, un aporte mensual de 80 mil pesos, y financiamiento de un semestre de estudios en el extranjero, dependiendo de cada caso.

Desde diferentes áreas de la educación manifestaron su preocupación por el futuro del beneficio, tanto por las pocas certezas que se tienen respecto al sistema que recibirá a los futuros profesionales como también al efecto que tienen hoy nuevas propuestas del Gobierno, como la gratuidad.

SITUACIÓN ACTUAL

A nivel país la cantidad de beneficiarios disminuyó un 21% respecto a 2015, pasando de cerca de diez mil a siete mil beneficiarios en total y reduciendo la inversión fiscal de $23 mil millones a $15 mil millones.

“Existen varios antecedentes que permiten suponer que la política de gratuidad impulsada por el Gobierno, que tiene una serie de efectos negativos, ha impactado en otros programas como en la Beca Vocación de Profesor, que junto con financiar la carrera incorpora una serie de compromisos. La gratuidad quita esos compromisos y se pierde la correlación de llevar a estos docentes a recintos rurales”, reflexionó Raúl Figueroa, abogado y director ejecutivo de Acción Educar.

En la Región del Biobío, el porcentaje aumentó a un 11% este año, pese a que la cantidad total de beneficiarios totales alcanzó los 875 (143 de primer año y 732 renovantes), dos más que el año pasado. El mayor gasto respecto a la cobertura del beneficio la ha asumido la Universidad de Concepción, con casi tres mil millones de pesos, entre 2013 y 2015.

“El beneficio ha permitido que una cantidad considerable de estudiantes de la Región, sobre los mil, esté haciendo uso de la beca. Nosotros tenemos la esperanza y convicción de que cumplirán el compromiso con el Estado, de que terminando su carrera se incorporen a la educación pública”, analizó el seremi de Educación Sergio Camus.

PROYECCIÓN

“La beca obedeció al mismo objetivo que tiene la nueva Carrera Docente, que se centra en atraer a los mejores estudiantes para que estudien pedagogía y se desarrollen en recintos estatales públicos”, dijo el seremi de Educación Sergio Camus.

Esto tiene relación con la nueva Carrera Profesional Docente, que se comenzó a implementar a comienzos de mes y se centró en el incremento de la escala general de remuneraciones y oportunidades de desarrollo. Esta es la realidad, dijo Camus, a la que se enfrentarán los egresados de pedagogía.

Respecto a la implementación, la presidenta del Colegio de Profesores del Biobío, Olimpia Riveros, indicó que “es insuficiente. Se ha avanzado un poco, pero falta muchísimo. Aún hay muchas dudas respecto a la transparencia en el ingreso al servicio público y la salida del sistema”.

Además, la dirigenta presentó sus reparos respecto a la situación de los futuros profesionales que ingresarán al sistema público por medio de la beca: “Las nuevas generaciones de pedagogos entrarían a tener un sostenedor distinto y de un Servicio Local que aún no está muy claro del todo cómo va a funcionar”.

En esta misma línea, el director ejecutivo de Acción Educar, Raúl Figueroa, manifestó que el futuro dependerá de la implementación de la Carrera Docente, pero también de las fallas respecto a un trato más desafiante a los futuros docentes: “Los jóvenes cuando ingresan a una carrera piensan el tema de las remuneraciones futuras, pero también en buscar espacios donde puedan desarrollar todas sus potencialidades. La Carrera Docente les da poco espacio de desarrollo a quienes hoy son beneficiarios de la beca.  Eso, unido a la gratuidad universal, te puede llevar a pensar que se mantendrá el estancamiento”.

La Beca Vocación de Profesor, implementada desde hace ya cinco años, es una de las herramientas alternativas de acceso a la educación superior que será discutida en las próximas semanas como parte de la reforma a la educación superior junto a la PSU y el programa Pace.

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