Padres y académicos piden que las carteras involucradas “aclaren” si los colegios estarán abiertos o cerrados durante la semana adicional, luego que el ministro Ávila pidiera que, en lo posible, los niños estén en sus casas.
Una serie de dudas abrieron las declaraciones del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, respecto a la extensión y adelanto del receso escolar. Esto, porque según la autoridad educativa, dicho periodo adicional “no son vacaciones”, puesto que no habrá mayor impacto en la disminución de la transmisión de virus invernales si los niños y niñas no permanecen en sus hogares.
En las declaraciones, concedidas a El Mercurio, el ministro pidió a las familias que “comprendan la urgencia de esta medida” y que mantengan “dentro de lo posible” a los hijos en las casas, “para que así se cumpla con el objetivo de reducir la circulación viral”.
Desde la cartera de Salud -que ha salido de forma permanente a explicar la medida desde su anuncio el martes pasado- han hecho énfasis en que se mantiene la promesa de que los colegios serán “los primeros en abrir y últimos en cerrar”, y que, preocupados por la salud mental, esta medida se dio en un contexto “excepcional”, ante la saturación de camas críticas pediátricas.
El director ejecutivo de Acción Educar, Daniel Rodríguez, señaló que “más declaraciones del ministro (Ávila) van a generar más confusión”.
En ese sentido, agregó que “son acciones y resoluciones que transmitan claridad a las comunidades educativas y las familias (…) no se conoce ni siquiera el respaldo legal de este anuncio”.
Misma opinión tiene Valentina Rebolledo, vocera de la agrupación Escuelas Abiertas, quien también cree que “la comunicación de parte del Mineduc y Minsal ha sido confusa. Se anunció la medida como un adelanto de las vacaciones pero ahora se explica que ‘no son vacaciones'”.