Creen que el debate debe estar en la calidad educativa y no en la propiedad, y ponen en duda que el Gobierno pueda hacerse cargo de esta institución.
Por un tema de dimensiones, la discusión sobre la estatización de Inacap no es menor. Actualmente tiene tres instituciones -un centro de formación técnica, un instituto profesional y una universidad-, las que reúnen a 120 mil 327 alumnos, equivalentes al 10% de la matrícula de toda la educación superior. Y de concretar una expropiación, sería como aumentar en 72% la cantidad de estudiantes que están en las universidades estatales.
Por eso, rectores de otros planteles técnicos y expertos creen que generar un debate de estas características, en medio de la discusión de la reforma a la educación superior, provocaría incertidumbre en el sistema educacional.
Así lo cree Fernando Martínez, rector del instituto AIEP, que con casi cien mil alumnos es el más grande del país. “Existe un mito sobre la conformación jurídica de Inacap, pero preocupa la facilidad con la que se genera incertidumbre en los estudiantes… No les basta la que ya se generó sobre el financiamiento estudiantil y la gratuidad”, acusa.
A su juicio, la propuesta de estatización “es un ataque a una institución de enorme prestigio, pero lo hacen sin ningún argumento, y considero que es una irresponsabilidad que los honorables miembros de nuestro Congreso se presten para eso”.
“Es una pena que el debate esté en este nivel. Debemos pensar hacia delante y no destruir y generar incertidumbre. Hay un nivel de improvisación que no le hace bien al país”, puntualiza Martínez.
Centrarse en la calidad
Por su parte, el rector del Duoc UC, Ricardo Paredes, piensa que es “un error” centrar el debate en la propiedad de las instituciones y no en la calidad de la educación.
“En la forma, eso desvía la atención de los temas relevantes relativos a la reforma en el sector. Y en el fondo, no creo que quepa (para este debate) aproximarse a la educación superior en lo que diga relación ni con la propiedad ni con el gobierno corporativo, a menos que ello sea en detrimento de la calidad”, explica.
Y en ese ámbito, “Inacap tiene una acreditación alta y solo en esa dimensión, la calidad, focalizaría cualquier esfuerzo”, argumenta.
Capacidad de gestión
Entre los expertos, tampoco cayó bien la propuesta de los senadores del PS y del PPD. El investigador de la U. Diego Portales y experto educacional ligado al oficialismo, José Joaquín Brunner, dice que “francamente es una mala idea introducir un tema de esta envergadura a la discusión”.
Asegura que “el proyecto de reforma a la educación superior ya es muy incoherente y no soluciona nada seriamente. Y a esto se le agrega un tema completamente ajeno, que no está en el programa del Gobierno y que no ha sido jamás discutido por la ministra”.
Según Brunner, el Gobierno “ha estado dando un espectáculo bastante triste en cuanto a gestión estatal, por lo que hemos visto con la nueva universidad de Aysén y la de Rancagua. Y justo ahora se propone el traspaso de una institución que tiene una trayectoria y que está acreditada con la máxima distinción, lo que es una medida muy abrupta y extemporánea”.
Coincide Andrés Bernasconi, investigador de la U. Católica, quien duda “que alguien en el Estado sepa administrar un CFT o un IP como la actual administración del Inacap. Lo mismo pasaría con Duoc, porque no hay capacidades en el Estado para gestionar la educación superior técnico profesional”.
“Inacap hoy tiene un trayectoria y solidez que ya está súper bien reconocida. Eso legitima el modelo de gestión que tiene actualmente”, agrega.
Lo mismo cree el director ejecutivo de Acción Educar, Raúl Figueroa, quien resalta que “esta es precisamente una de las instituciones de educación superior que destaca por su prestigio y presencia a nivel nacional”, por lo que sería un error estatizarla.
“Es cosa de ver las mejoras sostenidas que han logrado y que se reflejan en el incremento permanente de su patrimonio, que es reinvertido en beneficio de sus propios estudiantes. Esta es una experiencia exitosa de gestión”, añade.
“Paraísos fiscales”
El rector Martínez (AIEP) cree que esta semana ha habido otros “ataques infundados” al sector educacional privado, como los dichos del presidente del Consorcio de Universidades Estatales (Cuech), Ennio Vivaldi, quien dijo que en Chile hay universidades que viven en “paraísos fiscales”.
“Es una acusación gravísima y sin presentar ninguna evidencia. Si él está en conocimiento de algún delito, es su obligación como funcionario público presentar las pruebas. Si no, es injuria”, plantea.
El Mineduc, en tanto, aún no ha hecho público el estudio que hizo sobre los antecedentes de Inacap.
Las universidades fiscales tienen168 mil estudiantes e Inacap suma 120 mil alumnos más. Estatizar esa corporación sería como aumentar en 72% la matrícula estatal.